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Soledad

Estar solo, como el verbo lo sugiere, es el hecho de estar sin compañía. En el otro lado, el sentirse solo, implica la sensación emocional de no estar conectado, identificado, o relacionado con nada o nadie. Y aunque difícilmente un ser humano está totalmente aislado del mundo, la sensación de estar desconectado hace que lo sintamos así.

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Esto quiere decir que las personas pueden estar rodeadas de familia, pareja, amigos, compañeros y pese a eso se sienten solos. Sienten que necesitan de la compañía de alguien para realizar casi cualquier actividad y se sienten ansiosos cuando pasan mucho tiempo sin compañía. 

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Para poder entender esta sensación y poder cambiar nuestra emocionalidad frente a ella, es fundamental reconocerla en nuestras acciones y decisiones, pues la soledad se genera en nuestra interpretación sobre lo que son las relaciones, lo que son los otros.

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Así que, sentirse solo o no, depende en gran medida de cómo se interprete ese “estar solo”. Depende de la actitud que se tenga ante esa soledad; y de los pensamientos que se tengan acerca de ella. Aunque esto es así en cualquier situación: los acontecimientos son neutros; somos nosotros quienes los interpretamos, de manera que produzcan más o menos malestar. 

 

Por ejemplo; si interpretas la soledad como una situación que te hará sufrir sí o sí, o como algo poco frecuente que por desgracia te tocó vivir a ti… o bien, como un castigo de la vida que le ha dado por fastidiarte, sin lugar a dudas lo pasarás muy mal. Si por el contrario, vives la soledad como una oportunidad para estar acompañado de ti mismo, para conocerte y crecer personalmente, para hacer lo que quieres cuando te apetece; para aprender a ser feliz sin esperar que venga nadie de fuera a hacer ese trabajo… entonces, la cosa será muy diferente.

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“Lo que hay que hacer cuando algo así pasa, es aceptar la soledad, no renegar de ella. Armarse de paciencia. Dejar fluir las emociones buenas y malas… dolor, miedo y similares. Es como un volcán de sentimientos que debe salir. Después hay que aprender a escuchar el silencio. Aprender a cuidarse, amarse, apreciar y agradecer; muchas cosas buenas surgen de esto”, es lo que recomendó la psicóloga María Ester Flores.

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¿Cómo se puede mejorar?

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Cambia el foco de tu atención

O lo que es lo mismo, deja de estar todo el tiempo pendiente de tu soledad. Deja de tener en mente todo el tiempo que te falta compañía, y recuerda todo lo que sí que tienes; que seguro, son muchas otras cosas. Como se dijo anteriormente, casi todo es una cuestión de actitud.

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Mantente ocupado

Sin duda, estar haciendo cosas todo el tiempo que sea posible, va a conseguir que ni siquiera te acuerdes de que estás solo. Piensa en todas esas cosas que te gusta hacer; en esas cosas que te hacen sentir bien… o en lo que te gustaría hacer y que aún no has hecho. Llena tu agenda y no tendrás ni tiempo para pensar en ello. Curiosamente, hay una serie de actividades concretas que hacen que se reduzca el sentimiento de soledad. Algunas de ellas son hacer ejercicio físico, que aumenta tu sensación de bienestar. Meterte en la historia de un buen libro, ayuda también a combatir la soledad.

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Valora las ventajas de estar solo

Por supuesto, somos seres sociales y a veces queremos, y otras necesitamos, estar en compañía. Pero, muchas veces la compañía implica tener que negociar con otros; para que nadie salga perjudicado. Cuando estás solo, tú decides lo que haces, lo que no, y cuándo lo haces… lo que comes, cuándo lo comes, dónde vas, cuándo vas. En definitiva, eres tú el que decide siempre. Y eso… si lo piensas bien, es una ventaja.

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Haz contactos a través de Internet

Otra opción para resolver esa soledad, sería contactar con personas a través de páginas de Internet; en donde puedes unirte a grupos que sean afines a ti en cuanto a gustos, intereses y aficiones.

Pero, la idea sería utilizar Internet para conocer gente y entablar relaciones personales y reales. Por el contrario, dedicar mucho tiempo a las redes sociales, lo que puede hacer es que te aísles de la vida real; que solamente te relaciones de una manera virtual, y esa no es la idea.

 

Adopta una mascota

Indiscutiblemente, es una buena manera de dejar de sentirse solo. Tener una mascota en casa, la que sea, no sólo te aportará compañía; sino que además, tener que cuidar de ella, te hará sentir mucho mejor que si te dedicas a cuidarte a ti solo.

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¿Cuándo pedir ayuda?

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Si ha tenido pérdidas que lo hacen sentirse solo, tómese su tiempo, es un duelo tiene su proceso. Si lleva más de un año con mucha tristeza, busque ayuda profesional.

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